Corte y corrupción III
Tercera entrega
Cómo viajar a Rusia
Nuevos audios revelan los conflictos de intereses y prebendas del juez supremo César Hinostroza y el consejero Iván Noguera con empresarios locales.
Por IDL-Reporteros
con la colaboración de Justicia Viva (*).-
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El jueves cinco de abril pasado, el juez supremo César Hinostroza, presidente de la Segunda Sala Penal Transitoria de la Corte Suprema, contactó por teléfono a Antonio Camayo Valverde, gerente general de IZA Motors, para coordinar el viaje que quería hacer con su esposa a Rusia para ver jugar a la selección peruana.
Hinostroza le indicó a Camayo – con tono de preocupación– que hasta ese momento no tenía noticias de Edwin Oviedo, presidente de la Federación Peruana de Fútbol (FPF), sobre los boletos. “Hasta ahora no me ha dado noticias para sacar mi pasaporte, mi pasaje, nada. (…) Para sacar el distintivo de la FIFA necesito dar el número de ticket de una las entradas por lo menos”, le dijo Hinostroza.
El gerente de Iza Motors le prometió que en una semana tendría los tickets. No había nada de qué preocuparse.
El empresario, además, le avisó al juez que estaba saliendo de Palacio de Gobierno. “Estoy en las altas esferas ahora pe’”, dijo Camayo. Hinostroza le pidió de inmediato que interceda con el mandatario: “No te olvides de hacer un envío, de un mensaje, con Martín pues”. “Sí, sí, yo el miércoles voy a estar con él, ya en su oficina y vamos a tener una mesa de trabajo”, respondió Camayo. “Ya, y ahí me dices. Ahí consúltale si puede, podemos conversar para que haya un puente ahí pues, ¿no?”, sugirió el juez. “Claro, y de ahí no va a ser puente, va a ser puentezaso. (…) Es más, es más… vas a estar, vas a estar quince días con su brazo derecho”, predijo el empresario sin identificar al presunto ‘brazo derecho’.
Estas coordinaciones futboleras llevaban ya varios meses. El jueves 8 de marzo pasado, entre las siete y diez de la noche, el juez supremo tuvo dos conversaciones telefónicas con su esposa, Gloria Gutiérrez, para definir el viaje a Rusia. En la primera charla, de las siete de la noche, Hinostroza le dice que vaya a buscar al gerente de Iza Motors a su casa “para decirle que tú quieres ir, que no te decepcione”. No queda del todo claro qué esperaban de Camayo. ¿Que pague los pasajes? ¿Que consiga entradas preferenciales?
Como ella ya tenía un compromiso pactado, al juez no le quedó más remedio que conversar directamente con Camayo. Unas horas después, Hinostroza llama a su esposa para confirmarle que que tenía buenas noticias sobre la posibilidad de ir al mundial.
En una conversación del jueves 10 de mayo, alrededor de las ocho de la noche, el juez supremo habla con alguien identificado como Alberto, quien le dice que hacia finales de ese mes tendría las entradas para el mundial de fútbol.
Según información de Migraciones, César Hinostroza salió del Perú el 13 de junio y su esposa tres días después. Ambos viajaron a Rusia, vía Francia; y volvieron juntos a Lima, vía Holanda, el uno de julio pasado.
Registro migratorio del magistrado César Hinostroza.
Registro migratorio de Gloria Gutiérrez, esposa de Hinostroza.
Al cierre de esta edición, IDL-R intentó contactarse sin éxito con Antonio Camayo y Edwin Oviedo.
A su turno, el mandatario Martín Vizcarra dejó saber, a través del premier César Villanueva, que no conoce a Camayo.
Entradas para el concierto
Aparece un nuevo personaje en esta trama, el empresario Mario Mendoza. El 16 de abril pasado, a las 5 y media de la tarde, este conversa con una persona que aparentemente trabaja en el Consejo Nacional de la Magistratura. Mendoza le dice a su interlocutor que recomendó al juez Ricardo Chang Racuay para su proceso de ratificación pero que “hay bastante fuerza negativa”. Ante ello, su interlocutor le asegura que “todos sus informes negativos han sido limpiados”.
Ricardo Chang es el juez que declaró fundada, en 2014, la acción de amparo presentada por el rector de la Universidad Inca Garcilaso de la Vega, Luis Cervantes, contra la comisión de Educación del Congreso, que investigó las irregularidades en su gestión. Chang fue cuestionado porque se graduó como magíster de Derecho Civil y Comercial en esa universidad poco tiempo antes.
Un mes después, el lunes 16 de mayo pasado, alrededor de las ocho y media de la noche, el presidente de la Corte Superior de Justicia del Callao, Walter Ríos, llama por teléfono a Mendoza para pedirle que lo apoye con el proceso de ratificación del juez Chang, que había empezado el 19 de marzo. “Hay que apoyarlo al ‘Chino’ huevón. Yo lo veo que está medio jodido”, le dijo Ríos a Mendoza. Además, este le pidió que interceda con el consejero Guido Aguila. Las gestiones con los consejeros Iván Noguera y Julio Gutiérrez, según Ríos, ya las estaba haciendo César. Todo indica que se trata del juez Hinostroza.
Ese día el juez Ricardo Chang había sido entrevistado por el consejero Noguera como parte del proceso de ratificación.
Minutos después de esta llamada, Walter Ríos hace otra a su esposa, Maritza Elizabeth Sánchez. Este le dice que acaba de salir de la presentación del libro de Guido Aguila titulado ‘Magistratura y Constitución – 1000 días en el CNM’, y que irá a cenar al chifa Titi con César y el ‘Chino’.
El cinco de junio, el pleno del CNM se reunió y ratificó al juez Ricardo Chang.
Ese mismo día, alrededor de las 8 y 30 de la noche, el consejero Iván Noguera llama a Mario Mendoza para avisarle que “salió todo bien”, como quien confirma una gestión exitosa. Inmediatamente, Noguera –conocido como Dr. Rock– le exige al empresario que le compre cincuenta entradas para uno de sus conciertos.
Esta no era la primera vez que Noguera intercambiaba favores con Mendoza. El miércoles dos de mayo pasado, Mario Mendoza lo llamó para pedirle que reciba a un amigo suyo que quería darle “una explicación”. Quedan en reunirse ese viernes por la tarde.
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